Un documental analiza cómo el dictador italiano ocultó al ídolo de la época mediante la censura

El dictador italiano quiso ensombrecer la historia de un atleta que, noventa años después de su hazaña, será homenajeado gracias a un documental con imágenes inéditas que se presentó el 21 de marzo, Día Internacional contra la Discriminación Racial.

Días después, el 30 de marzo, la cinta también será proyectada en la sede del Parlamento Europeo en lengua inglesa.

Diez años de trabajo documental

El director de la cinta y profesor de Historia y Filosofía, Tony Saccucci, ha explicado en una entrevista con EFE que quiso aportar su «pequeña aportación a la lucha contra el racismo» sirviéndose precisamente del ejemplo de Jacovacci.

«Este trabajo es el fruto de diez años de investigaciones con el objetivo de sacar a la luz la historia de Jacovacci», señaló Saccucci, quien denunció las dificultades para encontrar informaciones sobre el atleta.

El director subrayó que parte del mérito de este documental es del escritor Mauro Valeri, que trabajó durante seis años para publicar en 2008 un libro sobre el boxeador, que se titula Negro de Roma: historia de Leone Jacovacci, el invencible mulato itálico.

Pero, en concreto, una parte fundamental para la realización de este documental fue el denominado «librote», un diario en el que el boxeador reunió artículos e historias sobre su experiencia en sobre el ring.

Jacovacci, de padre italiano y madre congolesa y nacido en Congo, pasó su juventud en Roma antes de formarse como boxeador en Inglaterra, donde adquirió notoriedad bajo el pseudónimo de Jack Douglas Walker.

Sus auténticos orígenes fueron ocultados al público hasta que, en un encuentro celebrado en París, Jacovacci solicitó una botella de agua hablando en el dialecto típico de Roma, explicó Saccucci.

A pesar de su ascendencia italiana y de haber crecido en las calles de Roma, el boxeador tuvo que esperar casi cinco años para que le fuera reconocida la nacionalidad del país transalpino y tuvo que soportar largas medidas burocráticas antes de conseguirla.

El momento más alto de su carrera fue en el junio de 1928, cuando Jacovacci conquistó el título de los pesos medios contra su compatriota y símbolo fascista, Mauro Bosisio, en el estadio nacional de Roma ante más de 40.000 espectadores.

El boxeador se había convertido en un ídolo de los italianos, pero Mussolini no podía aceptar que un atleta mulato representara en el mundo a su país y por estas razones decidió cancelar su hazaña a través de una estricta y omnipresente censura.

No existe ni una foto de Jacovacci en la que salga con el cinturón de campeón europeo ni con un trofeo

«Es un documental que analiza la manipulación de la información realizada por el poder», informó Saccucci, al tiempo que apuntó que «no existe ni una foto de Jacovacci en la que salga con el cinturón de campeón europeo ni con un trofeo».

De hecho, el régimen fascista manipuló el vídeo del combate en el décimo quinto asalto, cortando fotogramas para esconder la verdadera evolución de los acontecimientos que se vivían sobre la tarima.

El director del documental sostuvo que la causa principal del racismo es «la ignorancia» y que «la diversidad asusta», por lo que consideró que la mejor manera para combatirlo es el estudio.

«Sólo hay un modo, empezar desde las escuelas, estudiar y acostumbrarse a la diversidad. Cuando hay más cultura, es natural que haya menos racismo», opinó.

En su carrera, el boxeador italiano tuvo una relación significativa también con el continente latinoamericano, al haber realizado varias giras sobre todo en Argentina, tal y como documentó el atleta en su diario personal.

«Tiene una relación fuerte con el mundo latino. Hizo algunas giras por el continente latinoamericano, fue a Argentina. Habla de eso en su diario. También hay fotos en las que sale con ropa típica de Argentina», afirmó Saccucci.

El trabajo del director conecta, con una alternancia de vídeos auténticos y actuales, el pasado y el presente y proporciona al público una historia impactante, que toca no sólo a Italia, sino a todo el mundo.

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