El sonorense Óscar Valdez protagonizó una violenta contienda con el filipino Génesis Servania, en la cual ambos rivales se fueron a la lona; sin embargo, el mejor boxeo del mexicano le permitió anular la fortaleza, reciedumbre y poderosa pegada del asiático para derrotarlo por decisión unánime (116-110, 119-111 y 117-109), ante un jubiloso público que no dejó de alentarlo. El dos veces púgil olímpico defendió con éxito por tercera vez su corona mundial pluma de la WBO.
Valdez mostró inteligencia al moverse sobre piernas, usar mucho jab y usar repentinos contraataques que mantuvieron en jaque al tagalo, no obstante el tremendo empuje del desafiante, cuyos obuses siempre mantuvieron en alerta al muchacho de Nogales.
El golpeo al cuerpo fue el arma principal de Valdez, que usaba su jab en forma persistente; sin embargo, un descuido en el cuarto episodio, cuando salía hacia su derecha hizo que Génesis le alcanzara con un largo derechazo a la cabeza que lo mandó a la lona. Servania se fue con todo sobre él para buscar el remate, pero el nuestro eludió la granizada.
Arriba en las tarjetas por un amplio margen, Valdez todavía regaló un último round electrizante a sus fans al fajarse, para confirmarse como un tremendo campeón.