Devin Haney parece tener a un aliado en Shakur Stevenson para lo que sería su posible pelea de campeoanto indiscutible ante el exrey libra por libra Vasyl Lomachenko; El exitoso regreso de Lomachenko al ring no obtuvo nada más que una respuesta aburrida de Shakur Stevenson. Después de echar una mano a su tierra natal de Ucrania en la invasión rusa en curso, el boxeador de 34 años se enfrentó al actual principal contendiente, Jamaine Ortiz, un rival que en los recientes tiempos se ha mostrado como alguien de calidad y nivel.
Catalogado como un favorito gigantesco, Ortiz no prestó atención a la naturaleza frívola en la que los apostadores veían sus posibilidades de poder ganarle al exrey libra por libra. En cambio, el joven de 26 años peleó con confianza frente a una multitud bastante escasa en el Teatro Hulu del Madison Square Garden el sábado pasado por la noche.
A medida que el nativo puertorriqueño disfrutó del éxito en los primeros asaltos del combate, incluso los partidarios más firmes de Lomachenko se cansaron. Con su pelea de regreso transformándose en su peor pesadilla, Lomachenko (17-2, 11 KOs) cambió las cosas en la segunda mitad del combate, casi que en tiempos de crisis porqué a los ojos de muchos el ucraniano podía estar perdiendo la pelea.
Un Ortiz visiblemente cansado caminó penosamente en los últimos asaltos del combate y no lucía bastante bien o al menos era totalmente diferente al principio del duelo. Obligado a pelear hacia atrás, Lomachenko continuó ganando fuerza. Aunque cerca, al menos en el ojo público, el ex dos veces medallista de oro olímpico consiguió la 17ª victoria profesional de su carrera.
Mientras la multitud de Nueva York vitoreaba y rugía, Stevenson negó con la cabeza con desaprobación. Aunque ha admitido en años pasados que Lomachenko es un boxeador de élite y un talento único, a la edad de 34 años, Stevenson cree que ha perdido un paso o dos, tal vez incluso tres.
«No es el mismo peleador que solía ser», dijo Stevenson en su cuenta de redes sociales. «Demasiado lento y viejo».
A pesar de las críticas mordaces de Stevenson, la reciente victoria de Lomachenko lo ha empujado al frente de la línea del campeonato. Según Bob Arum, el promotor del ucraniano desde hace mucho tiempo, su próxima aparición tendrá lugar contra el actual capo indiscutible de peso ligero, Devin Haney.
Con su curso de colisión aparentemente en ritmo para la primera mitad de 2023, Stevenson, después de haber visto la actuación apática de Lomachenko, ha llegado a la conclusión de que contra Haney, soportará la paliza de su vida.
«Devin gana, sin mayores problemas y eso es una realidad», finalizó Shakur Stevenson.
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