Vasyl Lomachenko está de vuelta al boxeo, y el sábado pasado consiguió una victoria ante el entonces invicto, Jamaine Ortíz, y si bien pudo terminar el combate de pie y con la mano en alto, a los ojos de muchos expertos del boxeo, colegas y fanáticos del deporte, el ucraniano no lució muy bien y algunos incluso llegan a comentar que va en decadencia, lo cual no sería una buena noticia ante una posible pelea en 2023 ante el monarca indiscutible de las 135 libras, Devin Haney.

Con el boxeador de 23 años manteniendo un firme control sobre los títulos de las 135 libras de la OMB, el CMB, la AMB y la FIB, Lomachenko (17-2, 11 KOs) se considera el oponente que va ganando la carrera por una pelea contra Haney en el 2023. Aparentemente consolidándose como uno de los principales contendientes, el ex campeón de 34 años superó al extremadamente hábil y duradero Jamaine Ortiz el pasado sábado por la noche en el Teatro Hulu del Madison Square Garden.

Jorge Linares, un campeón mundial en varias divisiones, pudo disfrutar de la pelea entre Lomachenko y Ortíz, y si bien el ucraniano es alguien a quien admira y considera un amigo, tuvo su comentario bastante frontal y claro sobre el rendimiento del mismo ante alguien de la talla de Jamaine.

«Lomachenko es Lomachenko, pero no es el mismo», dijo Linares durante una entrevista reciente con los medios de comunicación.

Además de Lomachenko lidiando con la edad, al enfrentar a Haney (29-0, 15 KOs), se enfrenta a un oponente que es considerablemente más joven y más grande que él. Pero independientemente de las desventajas físicas que encontrará en la noche de la pelea, Bob Arum, el promotor de Haney y Lomachenko, buscará llegar a un acuerdo entre ellos en la primera mitad de 2023.

En 2018, un exuberante Linares peleó contra Lomachenko en términos casi iguales. Pero, aunque registraría un knockdown en el quinto asalto, finalmente sucumbió al poder de pegada y las habilidades del ucraniano, perdiendo por la vía rápida en el 10º asalto.

Linares intentó convertirse en el primer hombre en poner la primera derrota en el récord del invicto Haney. Aunque valiente en sus esfuerzos, el boxeador de 37 años fue completamente superado en el transcurso de 12 asaltos. Teniendo en cuenta su gran familiaridad con ambos peleadores, Linares cree que su inminente enfrentamiento será uno para todas las edades. Sin embargo, tiene la corazonada de que Lomachenko simplemente está mordiendo más de lo que puede masticar.

«Respeto a ambos. Soy muy buen amigo de Lomachenko y Haney también. Si esa pelea sucede, es 60/40. Para mí, Haney tiene el mejor momento en este momento. Es rápido, es rápido, tiene poder. Se mueve muy bien en el ring».

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