Marlen Esparza, la campeona de peso mosca de la Asociación Mundial de Boxeo y el Consejo Mundial de Boxeo, defendió con éxito sus coronas ante la venezolana Eva Guzmán, en una pelea que fue bastante competitiva y a su vez entretenida en donde Esparza se vio obligada a sacar gran parte de lo mejor de sí misma por la constante ofensiva y presión que puso la venezolana Guzmán en todo el combate.
La pelea estaba programada para diez asaltos de dos minutos. Esparza buscó la victoria inmediata desde el principio, lanzando un puñetazo con malas intenciones a la cabeza de Guzmán. Guzmán, por otro lado, pasó la gran mayoría del asalto empleando un jab de zurda para tratar de mantener a distancia a Marlen. El segundo asalto vio a Guzmán peleando bien, aunque Esparza lució un poco más fuerte. Para el tercer episodio de la contienda, la agresividad y eficiencia de la venezolana Guzmán marcó la pauta en todo momento.
El 4to asalto fue bastante activo y entretenido, dado el intercambio de golpes que se mantuvo a todo momento. El quinto fue una pelea completa, con Esparza pareciendo tener una ligera ventaja. Esparza controló el quinto con golpes más certeros.
Para el sexto comenzó a parecer que Guzmán no era lo suficientemente grande ni fuerte para derrotar a la campeona defensora. Aún así, la retadora agresiva continuó haciéndole saber a Esparza que estaba en una pelea real en el séptimo episodio y que no se daría por vencida en lo absoluto. La pelea siguió siendo un asunto de alto octanaje hasta el octavo round.
Aunque no tan hábil como el campeón defensor, Guzmán se mantuvo agresiva y enérgica en el noveno. El asalto final fue una en la que Guzmán realmente llevó la pelea a Esparza. Sin embargo, no fue suficiente, ya que Esparza salió del ring con una victoria por decisión unánime y pudo defender sus cinturones con una pelea bastante aceptable en cuanto a rendimiento.
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