Josh Warrington admitió que sufrió de mucha pena, vergüenza y más luego de haber caído derrotado ante el mexicano Mauricio Lara a principio de año y tuvo que estar alejado de la gente, en su hogar, durante 6 semanas. El inglés comenzó 2021 como el peso pluma número uno de ESPN en el mundo, pero actualmente no tiene un estatus definido en su carrera como boxeador; renunció voluntariamente a su campeonato mundial de la FIB en enero del año en curso y un mes después cayó derrotado por nocaut ante Lara.
Warrington, de 30 años, solo está clasificado entre los 10 primeros por uno de los cuatro órganos rectores mundiales después de que Lara lo derrotara por la vía del nocaut en 9 episodios en lo que fue planificado como un duelo para mantener activo a Josh y luego buscar una pelea de alto nivel en un futuro cercano.
«Durante las primeras seis o siete semanas, estuve lidiando con lesiones y eso cubrió todos los pensamientos de perder», dijo Warrington. «Tuve una fractura de mandíbula, tuve que operarme en el codo, tuve un hombro dañado, mi oreja estaba perforada. Realmente no salí de la casa porque estaba un poco avergonzado y no quería encontrarme con gente que me preguntara ‘¿qué pasó Josh?'»
«Durante seis semanas, me estaba recuperando. Luego, cuando fui a la pelea Joseph Parker-Dereck Chisora, fue cuando me di cuenta porque esa debería haber sido mi noche, esa debería haber sido mi pelea con Can Xu. Estaba conduciendo de regreso desde Manchester esa noche y me derrumbé después de eso, probablemente el más bajo en el que he estado».
«Durante unas dos semanas, solo tuve la cabeza en mi …, simplemente deprimido por la casa, no podía molestarme por nada. El jardín estaba lleno de perros y no podía molestarme salir y lidiar con eso. Llegó a un punto en el que pensé que podía hacer algo al respecto o simplemente seguir deprimido, así que me sacudí el polvo y volví al gimnasio cuando pude. Pensé que no era el único peleador del boxeo que había perdido y ahí es donde mi mentalidad y motivación cambiaron «.
Warrington espera poder reparar el daño causado por la primera derrota de su carrera profesional en su ciudad natal de Leeds, en el Headingley Rugby League Stadium el sábado por la noche cuando se enfrente en revancha al mexicano Mauricio Lara y busque volver a poner en el carril positivo su carrera.
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