Brandon Ríos, el ex campeón mundial de peso ligero, busca sorprender a los críticos cuando enfrente al ex campeón de dos divisiones Danny García (33-1, 19 KOs) en una pelea de doce asaltos en peso welter el sábado por la noche desde el Mandalay Bay en Las Vegas
Ríos (34-3-1, 25 KOs), que regresa con el veterano entrenador Robert García, ha adquirido una nueva personalidad con un campo de entrenamiento sensato.
«Dejo de hablar cuando estoy golpeando la bolsa. No es que no quiera hablar, pero no soy físicamente el mismo y tengo que prepararme de la mejor manera para cualquier oponente», dijo Ríos.
El nativo de Oxnard dijo que no dejará de ser el «payaso habitual», pero se tomará las cosas más en serio, sobre todo porque cree que su retiro del deporte está a solo tres años.
«Pronto cumpliré 32 años (el 29 de abril) y veo que mi carrera termina a los 35, pero primero quiero asegurarme de terminar en la cima del boxeo», dijo Ríos.
El Consejo Mundial de Boxeo ha hecho su pelea con García una eliminatoria final, lo que significa que una victoria pondrá a Ríos en línea para una oportunidad por el título mundial contra Keith Thurman. Shawn Porter es el primer retador obligatorio en posición.
«Estoy peleando con muchachos jóvenes, tienen hambre y quieren ponerse a prueba», explicó Ríos. «Me han empujado al límite, me han exigido y Robert (García) ha hecho un buen trabajo en este campamento. Si derroto a Danny García, eso me llevará de nuevo a la cima».
Rios explicó que enfrentó en su momento al campeón de 8 divisiones Manny Pacquiao, en el 2013 con la mentalidad equivocada cuando fue totalmente dominado.
«Lo de Pacquiao, fue mi culpa», confesó Ríos. «La fama se apoderó de mí, no fue Brandon Ríos, era otra persona. Ya he estado en la cima y no quiero volver allá arriba de esa manera. Quiero estar allá arriba, sí, pero no actuando como un idiota, no con esa mentalidad. Mi trabajo es ir por eso, la victoria».
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