Un día como hoy, pero de hace 15 años, vivimos un verdadero thriller de sangre, sudor y dolor sobre el cuadrilátero. Diego ‘Chico’ Corrales y José Luis ‘Temible’ Castillo se enfrentaban en el Mandalay Bay Resort & Casino de Las Vegas en una pelea de unificación de cetros mundiales CMB (Castillo) y OMB (Corrales) del peso ligero.

Corrales, con 27 años de vida, llegó al compromiso con récord de 39-2 y 32 nocauts, mientras que Castillo presumía foja de 52-6-1 con 46 anestesiados y tenía 31 años de edad a cuestas.

Luego de una pelea encarnizada, llegó el décimo asalto y el azteca envió a la lona a Corrales mediante un brutal gancho de izquierda, ‘Chico’ se incorporó sobre piernas tambaleantes solo para ser enviado una vez más al tapiz, pero Corrales no iba a claudicar. El joven león se jugó un as que tenía guardado en la manga, audaz como era, escupió su protector bucal ganando alrededor de 20 preciosos segundos más, en su recuperación.

Corrales se levantaría de aquella caída, la que parecía ser el colofón de la pelea, para noquear de forma estrepitosa a Castillo sobre las cuerdas, dejando atónitos a los miles asistentes del Mandalay y a millones de televidentes que veían la contienda por Showtime.

Aún hasta la fecha persiste la polémica sobre el referee del encuentro, Tony Weeks, a quien se le acusa de haber dado demasiado tiempo a Corrales luego de su segundo derribo.

Cinco meses después Castillo vengaría la afrenta derrotando a Corrales por nocaut efectivo en cuatro rounds.

Irónicamente, Diego Corrales murió exactamente dos años después de su primera inolvidable batalla ante Castillo, un 7 de mayo del 2007 víctima de un accidente de motocicleta.

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